Mediados de noviembre y algunos ya tienen en mente la próxima cena de empresa. Y no estamos hablando sólo de los organizadores. Este evento va mucho más allá de compartir unas horas extras con las compañeras y compañeros de trabajo. Es bien sabido que este tipo de actos sirve para reforzar la comunión entre las personas y entre los propios empleados con la empresa.
En la cena de empresa del año pasado pude conocer un poco más a mis ?compis? y descubrí facetas que ni sabía de ellos, pues se trataban de aficiones que e horario laboral no podemos compartir. De esta manera supe que Julia, que por aquel entonces llevaba 5 meses con nosotros le encantaba jugar a la petanca a sus 26 años, rompiendo el falso mito de que es un deporte para gente mayor. Otro caso es el de Miguel, que ese jueves pudo asistir a la cena porque no tenía jornada de su liga de dardos. ¡Le flipan los dardos! Cesc nos contó quien le puso el nombre y todo viene del futbolista catalán, con quien comparte nombre, edad y cierto parecido, aunque el nuestro no le gusta el fútbol. El director de eventos, Sergio, es un apasionado y un gran entendido de los vinos. Pero a él sí que se le nota su afición por el buen comer y beber. Y así podría estar contando el resto de mis ?compis?, pues previamente realizamos una actividad para tratar de conocernos mejor entre nosotros.
Con este ejemplo quiero mostrar que una buena organización de la cena de empresa es de lo más divertida y eficiente. La semana siguiente, entre diferentes bromas, trabajamos en un ambiente mucho más distendido y familiar, siempre cumpliendo con nuestra labor.
Para organizar este tipo de eventos se debe tener un día fijado (aunque no a todo el mundo le irá bien), promocionar ese evento en un lugar destacado dentro de la oficina y hacer llegar las invitaciones a todos los miembros. Siempre que el día siguiente no se tenga que trabajar, ese será el día perfecto.
La ubicación siempre será de gran importancia para que pueda asistir el mayor número de compañeros posible, aunque siempre está el truco de realizarla en sitios relativamente cerca del lugar de trabajo. Cuando mayor antelación, mejor será tener disponibilidad. Y más si se trata de un grupo grande.
Elegir menú siempre es complicado, aunque si la empresa dispone de un presupueste limitado las opciones se verán reducidas. Siempre debemos tener en cuente si hay algún trabajador que tenga algún tipo de alergia alimentaria. Una vez se tenga todo acordado será el momento de enviar las invitaciones personalizadas.
¡Ah! Y no os olvidéis nunca de realizar alguna actividad que pueda serviros para mejorar los vínculos entre vosotros. Si tenéis alguna duda sobre qué tipo de actividad realizar, no dudéis y poneros en contacto con Entretenemos, pues os podremos orientar hacia la actividad que puede gustar más (magia, humor, espectáculos con fuego, algún tipo de baile, etc).
Muy buen post!!! Se ve que teneis experiencia y claro de lo que hablais. Me encató leeros. Es muy importante desde el primer punto organizativo en un cena de empresa.