En el último post hablábamos de la primera parte para organizar una cena de empresa, más centrada en elegir algún tipo de local para realizarla antes que traerte el restaurante a casa. En esta nueva entrada queremos poner el punto en esta nueva idea. Resumiéndolo en una palabra: catering.
Parece la propuesta más cómoda, pues no te tienes que mover de tu lugar de trabajo para celebrar este tipo de eventos. Siempre está la opción de alquilar algún espacio o finca si las condiciones de la empresa u oficina donde trabajas no esté lo suficientemente preparada para realizarlo.
Hecho este pequeño matiz te proponemos que elijas entre las tres opciones que un catering te ofrece. La primera es cada vez más popular, se trata de los cocktails. Comer de pie para entablar conversaciones y anécdotas con tus compañeras y compañeros es la opción más informal y cuyo éxito suele tener un porcentaje de acierto muy alto.
La segunda se trata de algo más clásico, es decir, compartir la cena alrededor de una mesa. Un menú establecido y que te sirven sin que te tengas que mover de la silla. Pero aquí estrechar los vínculos con los demás es más complicado, aunque a veces se suelen complementar con un pequeño aperitivo cocktail antes de empezar la cena propiamente.
Y la tercera es muy poco corriente, aunque también es otra alternativa. Ahora hablamos de las comidas bufé, donde los asistentes elegirán entre las diferentes opciones que se le presentan y se harán ellos mismos su propio menú, siempre ayudados por los camareros y cocineros presentes en el acto.
Ponte en contacto con los caterings. Si has trabajado con alguno en otros eventos ya conoces su manera de proceder. Esto te servirá para ahorrar tiempo y estrechar la relación con el catering con que hayas colaborado. Si prefieres probar algo nuevo, pide propuestas, presupuesto y la posibilidad de realizar una prueba de menú. Esto último, cuánto mayor sea el grupo, más facilidades tendrás.
Cuando tengas tu evento personalizado, hazle llegar al catering las particularidades y asegúrate que se comprometen a hacer llegar tus instrucciones a sus empleados, para que así no haya ninguna duda el día de tu cena de empresa. De esta manera te aseguras que el catering cumpla y complementa las expectativas de tu evento.
En realidad hay tantas opciones como eventos se realizan. No te cierres ninguna puerta y abre los brazos a los condicionantes que puedan dotar a tu evento de experiencias nuevas y únicas.