Hace casi 20 años de mi comunión. Todavía recuerdo algunos detalles, otros los recuerdo cada vez que miro el álbum fotográfico de ese día. Estaba mi familia al completo. Fue en la iglesia de mi ciudad. Había multitud de personas: mis compañeros de curso, chicos y chicas que lo habían hecho en otros horarios, las respectivas familias, curiosos que querían ver a toda aquella gente en la puerta? Además, una charanga estaba tocando en la misma plaza.
Pero lo que todo niño deseaba más que nada en su gran día hasta la fecha era el banquete o, mejor dicho, las sorpresas que nos esperaban tras una mañana de rituales y fotografías. Fuimos a un restaurante con mi familia y algunos amigos. Primero, segundo, postres y? ¡regalos!
Abría los paquetes con toda la alegría del mundo, como si no hubiera un mañana. Una armónica, un par de libros, un videojuego (de los que ahora sólo nos acordamos los más nostálgicos)? Y cuando íbamos a salir a la calle a jugar con los amigos, mis padres nos detuvieron. ¿Qué pasaba?
En pocos segundos apareció en el privado del restaurante un payaso para terminar de amenizar el día. Reímos mucho, mucho. Me hizo una serie de bromas que hacía pasarlo casi mejor a los adultos que a mí. Incluso algunas bromas que yo no entendía pero mi familia sí, pero reía igual. Pasamos unos buenos minutos. Creo que jamás olvidaré a ese hombre de pantalón azul, tirantes verdes y camisa roja.
Ahora llega la comunión de mi sobrina y, si os digo la verdad, jamás he sido muy original a la hora de hacer un regalo. Prefiero dar lo que llamo ?una experiencia?. Es por esto que me acordé de cómo fue la mía. Me gustaría darle una actuación y que la pusieran al centro de todos. Pensé en cómo habrían dado mis padres con aquel profesional de la sonrisa infantil, puesto que hace dos décadas no habían las mismas facilidades que ahora.
Pero mi problema es diferente. Mi causa está en el amplío abanico de profesionales y de muy diferentes artes. ¿Cuál elegir?
En partfy.com me ayudan a focalizar mis esfuerzos en las propuestas que ellos me ofrecen según mis necesidades. Me ofrecen profesionales cerca de mi ciudad, de disciplinas muy variadas, con presupuestos ajustados? Estoy mirando a ver que es lo que más le puede gustar: animadores, payasos, magia infantil, etc. O con lo que a ella le gusta bailar, tampoco descarto en ¡ponerle unos músicos para que le toquen las canciones que más le gustan!
Si duda las animaciones infantiles para todo tipo de eventos cada vez están más de moda, pero sobretodo las animaciones infantiles para comuniones, y como siempre los niños quieren lo que ven, así que si algún compañero ha tenido animación infantil por su comunión ellos también quieren. Me parece que es algo que alegra el día y le da un toque original, además de que te aseguras de que los niños se diviertan y disfruten de ese día tan especial, como es la primera comunión.