Los niños descubren el mundo a través del juego. Esta es su manera de aprender y comprender el entorno que les rodea. Ahora que se acercan las vacaciones podemos pasar mucho más tiempo en familia. Por este motivo, queremos compartir contigo estos juegos educativos para niños. La mejor manera de divertirse todos juntos.
Juegos educativos para niños
El juego es una parte imprescindible en el aprendizaje infantil. Y es que no se juega para aprender. Más bien, se aprende jugando. Si quieres que tus hijos no solo estén entretenidos, sino que además estimulen su creatividad e inteligencia, prueba a poner en práctica con ellos los siguientes juegos educativos para niños:
El abecedario en tapones
Podéis crear vuestro propio abecedario utilizando tapones de plástico. Esta es una estupenda manera de que los niños aprendan las letras de forma divertida. Guarda 27 tapones de botellas u otros envases de plástico. Si son de color blanco mejor. A continuación, empezad a dibujar las letras del abecedario sobre papel de cartulina. Recuerda que cada letra tiene que ir pegada sobre un tapón, así que el tamaño deberá ser acorde a él. Esto ya os llevará un buen rato. Finalmente, pegar cada letra sobre los tapones y desordenarlas sobre la mesa.
El juego consiste en pedir a los niños que busquen una determinada letra, por ejemplo, la A, hasta que se aprenda todas ellas. Pueden ser mayúsculas o minúsculas. Si los niños ya son un poquito más mayores se les puede pedir que formen letras e incluso pequeñas frases con las letras de los tapones. Una variante de este juego casero consiste en recortar las letras del abecedario en goma eva para mojarlas en tinta y usarlas a modo de tampón sobre folios. En poco tiempo tendrás una especie de imprenta casera muy divertida. Pero, ¡ojo! No olvides hacer las letras al revés para que en el momento de la impresión sobre el papel salgan al derecho.
Puzles con cajas de cartón
Los niños adoran colorear. Si incluimos esta actividad junto con un juego de puzle el resultado es de lo más motivador. Para este juego educativo casero solo necesitas unas cajas de cartón de galletas o cereales con el tamaño de un folio. Elige un dibujo cualquiera o imprime uno que les guste a los niños y pégalo sobre la caja. Con un lápiz haz varios trazos para romper visualmente el dibujo a modo de puzle. En la parte posterior del cartón pinta tantas rayas como piezas tenga vuestro puzle y córtalas con un cutter. Si los niños son muy pequeños se puede enumerar las piezas para que el juego no les resulte frustrante o aburrido. El juego consiste en pintar con colores el dibujo para posteriormente tratar de encajar todas las piezas en su lugar. Para niños más mayores puedes optar por hacer mapas de geografía,
Teatro de sombras
Las marionetas es uno de los juegos que más éxito tiene entre los niños. Ahora ya puedes crear tu propio teatro casero con casi cualquier elemento: calcetines, guantes, cacerolas, fregonas, rollos de papel, etc. Una buena idea es decidir entre todos la historia que vais a contar y los personajes que van a intervenir en ella. Puede ser un cuento inventado o uno que ya sepáis y os guste. Seguidamente, dibujaréis sobre láminas de cartón o cartulina solo la silueta de los protagonistas de la historia. No olvidéis incluir rasgos que los diferencien bien unos de otros. Finalmente, cada personaje irá pegado en una pajita de plástico o sobre un palo de helado.
El juego consiste en buscar una pared lisa y de color sobre la que colocaremos las marionetas. Los niños han de apuntar con una linterna directamente hacia nosotros mientras les contamos el cuento. Sobre la pared se dibujarán las sombras de los personajes. Lo ideal es hacer partícipes a nuestros hijos a lo largo de toda la función. De esta manera, se sentirán como verdaderos personajes de cuento. Haz que los personajes hablen con ellos y les hagan preguntas. Crea una trama en la que juntas tengan que tomar decisiones para conseguir algo. ¡Dejad volar vuestra imaginación hacia el mundo de la fantasía! Os prometemos que pasaréis una tarde de lo más divertida en la que seguramente surjan anécdotas que recordar en un futuro.
El bote de las matemáticas
Una de las asignaturas que más cuesta arriba se les hace a los niños son las matemáticas. Sin embargo, con estos juegos didácticos los números no volverán a ser un problema. Los botes de las sumas es un juego realmente divertido. Solo necesitas varios palitos de helados que pintaréis cada uno de un color y botellas de yogures bebibles o de cualquier otro producto para manualidades. Sobre goma eva dibujaréis y recortaréis los números, así como los signos matemáticos de la suma, la resta, la división, la multiplicación y el igual para el resultado. Los números irán pegados sobre cada botella. Por ejemplo, si tengo una botella con el número 3, el niño deberá meter tres palitos de helado dentro. Para hacer operaciones solo tendréis que combinar los diferentes números de las botellas con los signos matemáticos. Lo cierto es que es de lo más divertido.
Una versión de este juego es la máquina de las sumas. Con una caja de cartón, unos rollos de papel de cocina y unas canicas podéis fabricar vuestra propia máquina de matemáticas. Pega dos rollos de papel previamente coloreados sobre una de las caras de la caja y orientados hacia un cuenco o recipiente que colocaréis abajo y justo en medio de los dos rollos. En la parte de arriba se escribe en lápiz la operación que queréis realizar. Por ejemplo, 3 + 5. El niño ha de coger el número exacto de canicas e introducirlo por cada tubo. Es decir, 3 bolitas por uno de los rollos y 5 por el otro. Al final, solo tendrá que recoger el resultado del cuenco. O lo que es lo mismo, 8 bolitas. Les encantará ¡Estarán horas haciendo sumas!
La importancia de aprender jugando
Los niños tienen una imaginación y creatividad desbordante. Están en la etapa perfecta para aprender a través del juego. Este método les permite adquirir nuevos conocimientos sin presión. Además, sus niveles de atención y concentración experimentaron mientras aprenden jugando. No olvides utilizar juegos educativos para niños que estén relacionados con los gustos e intereses de tus hijos. De esta manera, su motivación aumentará.
Sin darte cuenta, tus hijos estarán aprendiendo a tomar mejores decisiones, así como a relacionarse mejor con los demás compañeros. Jugar implica respetar un proceso y unas normas. Gracias a esto, los pequeños mejorarán su comportamiento y mejorarán su autoestima. Los juegos enseñan a los niños a que el fallo no es un fracaso, sino una parte imprescindible para el aprendizaje.
El desarrollo cognitivo durante el juego se produce cuando los niños tienen que pensar, memorizar y recordar conceptos. Fabricar sus propios juegos educativos no solo les enseñará cosas nuevas, sino que además potenciará su creatividad. Por otro lado, jugar permite que los niños mejoren sus habilidades comunicativas, el autocontrol y el sentimiento de responsabilidad.
Este verano aprovecha tus vacaciones para pasar más tiempo jugando con tus hijos. Tú te divertirás igual que ellos y seguramente recuerdes conocimientos que tenías un poco olvidados. No olvides que en Partfy tenemos todo lo que necesitas para la organización de tus fiestas infantiles. Crea tu evento de manera rápida y sencilla.